Reproducción y cría
Como se explicaba anteriormente los cachorros de la pareja alfa son los únicos propiamente designados dentro del grupo para sobrevivir. Por lo general las lobas eligen con dos o tres semanas de antelación al parto el lugar donde nacerán las crías. De tal forma, suelen crear un refugio al final de un túnel bajo tierra, donde los lobeznos permanecerán hasta las 10 semanas.
La pareja alfa escoge para la madriguera un sitio que se encuentre cercano al agua y en un terreno en que el resto de los lobos puedan cazar, al tiempo que estar pendientes de la defensa de los pequeños. Leche es el aliento que compone la dieta de los recién nacidos, hasta cerca de un mes, cuando combinarán este nutriente con comida ya masticada por otros lobos. Una señal de que los pequeños tienen hambres es que levanten una pata. El cuidado de los cachorros es responsabilidad de todos. De modo que cuando la madre sale momentáneamente, otros miembros de la manada velan por ellos.
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